Del otro lado del charco
Cinco días faltan para encontrarme por primera con el viejo continente, cuna de las civilizaciones y de la cultura. La emoción invade cada poro con el que respiro y paso contando las horas para subirme al avión. Pero la emoción también es por encontrarme con una personita a la cual llevo meses sin ver, a quien quiero mucho, y que por cierto se va a graduar; ¡mi niña macaco muchas felicidades! y verás que nos divertiremos como enanas.